Twinero ha cerrado, ¿y ahora qué?
Consecuencias en un retraso en el pago de un préstamo
¿Se puede solicitar una prórroga o extensión?
¿Qué ocurre con mi préstamo si Twinero se lo vende a otra entidad?
Twinero abandona el mercado online de concesión de créditos. En este artículo te contamos cómo actuar si tienes una deuda con ellos, a quién tienes que pagar y dónde comunicarte con Twinero. Pero antes de pasar a las malas noticias, pongamos en contexto qué es Twinero y cómo funciona.
Twinero era una plataforma para solicitar préstamos online. Su objetivo era ayudar a las personas a:
Para obtener y devolver un préstamo online, tan solo debías registrarte y en unos minutos podías aceptar la oferta de préstamo online de Twinero y te transferían el dinero en 15 minutos.
Como en la mayoría de empresas prestamistas, debías cumplir algunos requisitos:
En la mayoría de los casos, los préstamos y los derechos para atenderlos se compran y venden. Si se tiene una cuenta pendiente, será un administrador quien cobre los pagos mensuales del préstamo, acredite tu cuenta y maneje el depósito en garantía si lo hubiera. Si el administrador es diferente del prestamista original, y el prestamista original deja de operar, lo correcto es continuar realizando los pagos al administrador antes de la fecha de vencimiento, pero todo dependerá del contrato que se haya firmado y del cual se debe disponer de una copia en el momento de la contratación del préstamo. Puedes revisar los documentos que te hizo llegar Twinero vía email en el momento de la aprobación del crédito.
Es muy probable que Twinero venda sus activos y transfiera la administración del préstamo a otra institución financiera bajo la supervisión de una corte de quiebras. También es probable que, simplemente, un administrador de préstamos cierre y cese sus operaciones. Es decir, que le transfiera la administración del préstamo a otra compañía, por eso hay que estar al tanto de cualquier comunicación que puedan hacer llegar sobre qué hacer con tu deuda.
Lo mejor será estar al corriente de toda la correspondencia y mensajes de correo electrónico y contestar a las llamadas y mensajes telefónicos referidos a un cambio de entidad para tu préstamo, pagos atrasados, o pagos no recibidos. Se recomienda que, para evitar una estafa, se examinen todas las notificaciones que se reciban y que antes de enviar el pago, la persona deudora se comunique con el nuevo administrador del préstamo.
Sea la razón que sea, si un préstamo es transferido, la persona debe recibir dos notificaciones: una por parte del administrador original y otra por parte del nuevo administrador. El administrador original debe notificar por lo menos con 15 días de antelación a la fecha de transferencia del préstamo.
El nuevo administrador del préstamo también debe notificar a la persona dentro de un plazo de 15 días contado a partir de la fecha de la transferencia del préstamo.
Como exige la ley, las notificaciones deben incluir la siguiente información:
Las notificaciones también deberán contener una declaración en la que se establezca que la transferencia del préstamo no afectará ninguno de los términos o condiciones del contrato, excepto aquellos términos o condiciones que estén directamente relacionados con la administración del préstamo.
Además, después de que el préstamo sea transferido a un nuevo administrador, el prestatario tiene un período de gracia de 60 días. Esto significa que no se podrá imputar ningún cargo por pago atrasado en caso de que por error se envíe el pago al administrador previo, y el nuevo administrador no puede reportar el atraso o mora del pago a una compañía de informes de crédito.
Se recomienda guardar y tener a disposición:
En el caso de que existiera alguna controversia con el préstamo, se puede continuar pagando el préstamo, pero se recomienda enviar una carta al administrador del préstamo para plantearle el problema, y guardar una copia de la carta y de los documentos adjuntos necesarios para fundamentar su disputa. Por último, se recomienda enviar la correspondencia por correo certificado con acuse de recibo, o enviarla por fax y guardar el impreso de la confirmación de transmisión.
El panorama económico mundial actual que se nos presenta a diario en los medios de comunicación está causando que cada vez más personas se pregunten cuáles serían las repercusiones de una posible quiebra de una entidad financiera.
Quizá una de las preguntas que más se plantea una persona que contrae diferentes préstamos es la de qué ocurriría con los que hemos contraído con las diferentes entidades financieras. ¿Se dejarían de pagar las deudas si la entidad financiera quiebra?
Si los fondos propios de una entidad financiera se reducen con respecto a su pasivo, se produce una situación en la cual ésta no puede atender sus compromisos de pago y, a no ser que capten recursos en los mercados mediante ampliaciones de capital, se entra en una situación de quiebra técnica.
Sin embargo, en caso de una bancarrota, hay que seguir pagando las deudas. Las deudas figuran como activo en el balance de la entidad financiera, y en caso de presentar concurso de acreedores, pasarían a formar parte de los activos de la masa concursal.
Si los administradores concursales son capaces de llegar a acuerdos con los acreedores de manera que la entidad pudiese ser viable de nuevo, se podría llegar a reflotar la entidad y, por tanto, se tendría que seguir pagando la deuda a la misma entidad financiera.
Si esto no es posible, en el caso de los bancos, se procederá a realizar una liquidación ordenada, los bancos nacionales e internacionales seguramente comprarían los activos del banco en liquidación, entre ellos, las deuda de préstamos. Por tanto, se dejaría de deber la deuda a una entidad financiera para deberla a otra diferente.
Por tanto, en estos casos, una persona no se liberará de sus deudas. Es probable que solo hubiese que cambiar de acreedor, pero con las mismas condiciones de la escritura firmada en un primer momento.
Los créditos rápidos se han convertido hoy en día, y debido a la crisis, en uno de los productos financieros con más demanda y a los que está recurriendo cada vez un mayor número de personas. Son un tipo de créditos recomendados si necesitamos liquidez inmediata y no podemos esperar la concesión de un préstamo personal en nuestra sucursal. Normalmente se utilizan para las reformas del hogar, para organizar una boda, para hacer viajes, para comprar una moto o un electrodoméstico, etc.
Esta clase de créditos se distinguen de los "ordinarios" por ser más fáciles y rápidos de conseguir: se solicitan llenando un formulario a través de internet o telefónicamente y el dinero se recibe en un máximo de 24-48 horas. Además, no se ha de indicar la finalidad del crédito, cosa que se valora positivamente por quienes lo solicitan.
Actualmente los consumidores prefieren este tipo de entidades financieras antes que la banca tradicional a la hora de solicitar financiación al consumo, dado que los bancos tradicionales apenas conceden financiación personal si no se aporta todo tipo de garantías.
Los créditos rápidos son una forma de conseguir dinero rápido sin trámites complicados y tener que aportar garantías. Si se usan bien son muy útiles, pero nunca hay que dejarse llevar por el exceso de consumo y sobreendeudarse.
Hay otras entidades que ofrecen créditos rápidos con muy buena oferta en el mercado de los micro préstamos, aquí te dejamos unas cuantas:
En el caso de Twinero, si te retrasas hasta dos días, no deberás pagar intereses de demora. El tercer día de impago se aplicará un interés de demora equivalente al 7% de las cantidades totales atrasadas. A partir de entonces, cada día que pase se añadirá a tu deuda un 1% de interés de demora. En otras entidades es similar:
Si no puedes pagar tu préstamo en la fecha de devolución acordada, deberás abonar una prórroga y aplazar el vencimiento 7, 14, 30 o 45 días, depende de la entidad. Aunque realices el pago de tu prórroga antes de la fecha de vencimiento siempre se calculará a partir de esa fecha. Así que puedes prorrogar con antelación. Debes saber que con las extensiones podrás devolver el préstamo más tarde, pero la cantidad pendiente no se reduce. De manera que acabarás pagando más de lo que inicialemente debías: las prorrogas, el principal y los honorarios.
Si no vas a poder pagar a tiempo, siempre es aconsejable que te pongas en contacto con la entidad que administra tu préstamo.
Las cláusulas del contrato que firmaste en su momento siguen estando vigentes, de tal modo que las condiciones del préstamo no pueden ser alteradas. Así que el nuevo acreedor no podrá añadir comisiones ni endurecer las condiciones de pago y deberá respetar plazos, tipo de interés, cuota, etc.
Habituallmente esto solo sucede cuando la entidad va a cesar su actividad o cuando se trata de una deuda vencida hace tiempo. Cuando una entidad cede la deuda a otra, a una financiera o a un fondo de inversión, lo primero es tener claro que es perfectamente legal que se venda tu deuda. La cesión de préstamos se regula, con carácter general, en el Código Civil, si bien existen ciertas reglas específicas tanto en el Código de Comercio como en la Ley Hipotecaria, tal y como explica el Banco de España:
"Consiste en que un banco, por ejemplo, vende una serie de créditos a otra entidad, que se convierte en el nuevo acreedor del préstamo. Este hecho genera confusión en el cliente que no sabe realmente qué va a pasar con su deuda".
Twinero, como muchas otras entidades de micropréstamos en España, ha tenido una mala temporada que le ha llevado a no conceder créditos rápidos. En otras ocasiones hemos hablado de Fianceo, Prestao10 o Kredito24, que han dejado de operar en nuestro país. Y es que, aunque parezca lo contrario, no es fácil gestionar una empresa de micropréstamos.
En cualquier caso, si tienes un préstamo de Twinero, puedes seguir nuestras recomendaciones explicadas en este artículo para saber actuar ante la deuda contraida.
Es recomendable no caer en posibles estafas y estar al tanto de cualquier comunicación que las entidades responsables de tu préstamo te hagan llegar. Y siempre ¡asegúrate de que se está procediendo según la ley!